Cómo trabajamos

Desde el momento en el que decidimos que una de nuestras gatas va a ser mamá, seguimos un protocolo de actuación que adaptamos a la gata gestante y a sus futuros bebés, porque no hay dos animales ni dos procesos iguales.

La decisión de la elección de la raza persa fue de pura casualidad, ya que hace años entró en mi clínica una gata encontrada en las vías del tren; la cual estaba llena de nudos, esquelética y en muy malas condiciones de salud. Sin embargo, gracias a su carácter, a su docilidad y a una gran fortaleza, acabé descubriendo una gata persa chinchilla con unos ojos verdes preciosos que me enamoró, algo que me empujó a dedicarme a esta hermosa raza.

Por otro lado, la decisión de la raza British y Scottish Fold fue más tardía. Queríamos conocer el carácter de estos animales y su diferencia respecto a los persas, descubriendo así unos gatos más enérgicos y menos laboriosos.

Comenzamos nuestro trabajo desde el momento anterior a la gestación, y hasta pasados 9 meses desde el nacimiento de los gatitos, con mucho esfuerzo y compromiso, por amor y por la conservación de la raza.

Elegimos a la futura mamá por carácter y condición física. Para ello, realizamos un perfil general, un perfil vírico y una analítica de PKD (Enfermedad Poliquística del Riñón), previos a la monta.

Pautamos el plan de alimentación adecuado (rico en calorías y proteínas) y un aporte de vitaminas antes, durante y después de la gestación que garantizará el correcto desarrollo de los gatitos y proporcionará a la madre la energía necesaria para hacer frente al nacimiento y lactancia de sus bebés.

La acompañamos durante toda la gestación (imposible no hacerlo pues, a medida que las hormonas del embarazo comienzan a actuar se muestran más cariñosas y demandan más mimos) y realizamos varios controles ecográficos para prevenir cualquier posible complicación y comprobar el correcto desarrollo de los gatitos.

Llegado el momento del parto (una de las experiencias más emocionantes que nos toca vivir con ellas), las acompañamos para darle seguridad y tranquilidad (a veces durante horas) y asistimos en caso de necesidad por si hubiese que realizar una cesárea (los felinos traen al mundo a sus bebés como si nunca se hubiesen dedicado a otra cosa).

La bienvenida se la da su mami, que es la encargada de romper la placenta y lamerles para limpiarles el líquido amniótico y estimular su respiración. ¡Un momento mágico!.

Si todo ha ido bien, los gatitos buscarán enseguida a mamá gata y empezarán a mamar.

¡Es la forma de asegurar su supervivencia!

A partir de aquí, comienza nuestro trabajo con los gatitos recién nacidos.

Un seguimiento diario de cada uno de ellos: peso, exámen general y limpieza.

Al cabo de unas semanas comenzamos con los juegos, baños y cepillados, así se van acostumbrando a la manipulación y vamos creando un vínculo con ellos. Empieza su socialización con el resto de compañeros del hogar.

A partir de las 12 semanas, siempre dependiendo del estado de salud y madurez del gatito, se irán a su nuevo hogar.

En ese momento, se les realiza un análisis de inmunodeficiencia felina y leucemia, entregando los resultados a sus nuevos propietarios.

Procedemos a la implantación del microchip.

Entrega de la documentación necesaria.

A las 6 semanas comenzamos su protocolo de vacunación y desparasitación, requerida por Ley:

6 semanas Rinotraqueitis, Calicivirus y Panleucopenia felina. Desparasitación.
9 semanas Rinotraqueitis, Calicivirus y Panleucopenia felina. Desparasitación.
12 semanas Leucemia felina. Desparasitación.
15 semanas Rinotraqueitis, Calicivirus, Panleucopenia y Leucemia felina. Desparasitación.
18 semanas Rabia.

 

Entre los 6 y 9 meses de edad, dependiendo de las condiciones físicas, tamaño, peso y sexo, procederemos a su esterilización en nuestra clínica veterinaria.

Hasta aquí, más de 120 horas de trabajo, analíticas, ecografías, vacunaciones, desparasitaciones, esterilización, implantación del microchip, alimentación, vitaminas, cuidados y educación felina para entregarte un animal sano, fuerte y socializado, perfectamente adaptado a vivir en familia, también con otros animales y acostrumbado al aseo diario.

Por supuesto, tendrás su cartilla sanitaria al día y el correspondiente contrato. Una garantía para ti y un compromiso para nosotras.